Ya se conocen los dispositivos que van a controlar el acceso y sobre todo la salida de Calahorra durante los siete días de confinamiento establecidos para esta ciudad que comenzarán a las 0 horas del jueves y que se concretan en tres puntos de chequeo, dos de los cuales serán controlados por la Guardia Civil y un tercero por la Policía Local.
Así lo ha hecho saber la alcaldesa de Calahorra, Elisa Garrido, en una rueda de prensa en la que ha comparecido junto al director general de Salud, Pello Latasa, y el director General de Política Local, Ricardo Velasco. Estos últimos han explicado las razones que han llevado a la aplicación de medidas restrictivas en Arnedo, Calahorra y Rincón de Soto y que se basan, principalmente, en el “elevadísimo índice acumulado de casos positivos de Covid-19 que afectan a toda La Rioja pero en especial a estas tres poblaciones”.
Para garantizar la movilidad al mismo tiempo que el control de la pandemia, “se va a establecer un perímetro en el entorno de la ciudad con tres puntos de acceso. Dos de ellos van a ser permanentes y con control las 24 horas del día por la Guardia Civil con un dispositivo de 40 efectivos. Por otro lado –ha seguido explicando la alcaldesa– va a haber un punto de acceso temporal que sólo se va a abrir en los momentos de máxima afluencia de vehículos; es decir, horario matutino de desplazamientos laborales y última hora de la tarde y que evaluaremos si es necesario abrirlo en más ocasiones concretas dependiendo de cómo vaya la circulación. De este último punto de control se va a hacer cargo la Policía Local”.
En su intervención, Elisa Garrido, ha detallado que los puntos de acceso controlados por la Guardia Civil estarán en la avenida de Numancia –con salida hacia la carretera de Arnedo, Autopista y Carretera Nacional 232– y en el nudo de la Nacional 232 a la altura del Polígono de Tejerías.
Por su parte, la Policía Local controlará a determinadas horas el acceso a Calahorra por la carretera de San Adrián en la salida y entrada de Navarra.
El Ayuntamiento se ha comprometido a enviar esta misma mañana una nota informativa con los horarios concretos que se aplicará en los diferentes puntos de control, un control que en cualquier caso tendría que se aleatorio a las horas de máximo tráfico.
Es importante señalar que el Hospital de Calahorra va a quedar fuera de este perímetro “y por lo tanto los ciudadanos que tengan que acudir a este centro sanitario no tendrán que pasar por los puntos de control de acceso y salida de la ciudad”, ha dicho la alcaldesa.
Igualmente se estaría trabajando, según Garrido, “en que los polígonos industriales queden también fuera del área, de tal manera que las personas que tengan que acudir a su trabajo no tengan que pasar ningún control”. De esta manera se pretende evitar los problemas de retenciones que ocurrieron en el confinamiento de Alfaro en horas punta.
La colaboración de la Delegación del Gobierno en La Rioja, a la que se ha referido Elisa Garrido en varias ocasiones, se sustancia no sólo en la implicación de la Guardia Civil en este dispositivo sino también en los medios –principalmente bloques de hormigón– que la Demarcación de Carreteras del Estado en La Rioja va a prestar para el cierre de todos los accesos no controlados.
“Pido a toda la población de Calahorra que cuando tengan que hacer un desplazamiento o encontrarse con alguien piensen antes si eso es indispensable o pueden esperarse estos siete días para paralizar la expansión de la pandemia en la ciudad”.
Alarmantes indicadores sobre la incidencia del coronavirus en Arnedo, Calahorra y Rincón
Por su parte, Pello Latasa ha hablado de la situación epidemiológica en Arnedo, Calahorra y Rincón de Soto que se sitúan en el ámbito del elevado índice acumulado de La Rioja que se sitúa en 463 casos por cada 100.000 habitantes. “Es de las comunidades autónomas con una incidencia más elevada de España, sólo superado en las comunidades limítrofes por Navarra».
En concreto en Calahorra es uno de los municipios más afectados “con más de 300 casos diagnosticados en los últimos días y una incidencia acumulada que supera los 1.000 casos por cada 100.000 habitantes”. Siempre según cifras de Latasa, en los últimos siete días se han diagnosticado en Calahorra más de 100 casos con una incidencia acumulada de más de 400 casos por 100.000. “Tanto en volumen de casos como en incidencia acumulada el municipio está en umbrales muy elevados”, ha dicho el director general de Salud.
Latasa ha dicho que estos datos hay que tenerlos en cuenta en relación con la presión asistencial que estamos sufriendo. Una parte importante del Servicio Riojano de Salud ha suspendido su actividad habitual para dedicar su atención al covid “y esto genera un estrés en el sistema que es muy complicado de gestionar”, ha añadido. Como ejemplo ha puesto “la ocupación de camas en la UCI por pacientes covid, que está en torno al 37 por ciento y eso teniendo en cuenta que ya se ha hecho la ampliación de camas del plan de contingencia”.
Aunque la tendencia en los últimos días es a la estabilización, Pello Latasa ha comentado que la incidencia acumulada “sigue siendo mucho más alta de lo que nos gustaría”. Todo ello obliga a ser más proactivos en la prevención y motivaría las restricciones aplicadas en los tres municipios riojabajeños.
A este respecto cabe recordar que se están adoptando criterios en el Consejo Interterritorial según los cuales la aplicación de restricciones y confinamientos estará marcada para todas las comunidades autónomas por una incidencia acumulada que supere los 500 casos por 100.000 habitantes.
LA BRÚJULA ha querido saber si este criterio general aplicado a municipios de más de 100.000 habitantes marcará a partir de ahora la línea roja del confinamiento también en municipios menores como los tres interesados. Además, al igual que otros medios de comunicación se ha interesado en saber por qué ahora que el número de positivos desciende en Calahorra es cuando se van a aplicar las restricciones.
Latasa ha respondido que “las decisiones se toman cuando es posible tomarlas porque es importante consolidar los datos y son medidas de calado y hay que hacer las cosas con todo el tiemto que se pueda” y ha insistido en que “la presión asistencial que tenemos ahora es muy difícil de manejar”.
En cuanto a la línea roja de confinamiento, el director general de Salud Pública ha dicho que “no se puede hablar de líneas rojas porque la situación varía mucho y no es lo mismo una incidencia de 1.000 casos por 100.000 habitantes en un municipio que por ser muy pequeño implique que haya 10 casos con un solo brote y la cadena de transmisión bien identificada que una incidencia menor en ciudades mucho más grandes con muchos más brotes y donde el rastreo se hace muy complicado en un contagio comunitario. Se puede hablar de evaluaciones y de propuestas en función de los datos”.
Por su parte, Ricardo Velasco ha insistido en la idea transmitida ayer por la presidente riojana, Concha Andreu, que hablaba de las tres “ces”: ciencia, cogobernanza y concienciación. Así, el director general de Política Local ha explicado su presencia en el ámbito de la cogobernanza y ha sido optimista en la posibilidad de que Calahorra sea capaz de doblegar la curva de contagios al igual que ocurriera en Alfaro, “donde la experiencia fue positiva gracias al confinamiento y la responsabilidad individual de los ciudadanos”. Igualmente ha mostrado su confianza en que no sea necesario prolongar siete días más las restricciones en Arnedo, Calahorra y Rincón.
Velasco, junto a la alcaldesa, ha hecho un llamamiento a la población advirtiendo que “cuanto mejor lo hagamos estos días, más corto será el periodo restrictivo”.
Por otro lado, se mantienen las restricciones dictadas por el consejo de Gobierno para todo el territorio comunitario así como las del Ayuntamiento de Calahorra para el ámbito de esta ciudad.