Como ya se sabía, el día de San José no se vivió ayer en el barrio como todos los años, pero la familia Martínez-Ruiz, a la que se debe la tradición de celebrar la fiesta del barrio, continúa fiel a esa costumbre.
Por eso se dieron cita ayer en la misa de 12 que se ofició en la Parroquia de la Santísima Trinidad. Su asistencia a la misa a es una forma de dar continuidad a esta festividad que ayer no pudo celebrarse con procesión y reparto de flores, pero sí honrando al patrono en la parroquia.