La opinión generalizada de los calagurritanos es que el primer día de las «no fiestas» puede costarnos incluso más caro que en Alfaro. Es vox populi que ayer se formaron muchos grupos de jóvenes vestidos con sus blusones de peñistas y se organizaron fiestas privadas en cuartos, bajeras y huertos.
Vimos por la calle algunos grupos pequeños, de no más de cuatro o cinco jóvenes, cargados de bolsas y neveras. Lo demás no es difícil adivinar.
Pero tampoco debemos estigmatizar a la juventud por el comportamiento de una parte. De hecho, las terrazas de los bares se vieron llenas de jóvenes cumpliendo la normativa. Algo de lo que se encargan los propios empresarios hosteleros que, tal y como nos comentaron algunos, no quieren jugarse el cierre de sus bares por estos días.
Y es que hay otra parte de la juventud que sí cumple. El Consejo de la Juventud Comarcal de Calahorra ha lanzado una campaña para concienciar a los jóvenes de que cumplan las medidas durante las “nofiestas”, bajo el hastag #JuventudResponsable