La situación en la planta de biodiesel de Calahorra está «bajo control» según ha declarado hace unos minutos la presidenta del Ejecutivo riojano, Concha Andreu. A las 8 de la tarde, unos 25 bomberos seguían trabajando en el lugar para contener la temperatura de los depósitos que continúan ardiendo.
Andreu, que se encontraba en Madrid participando en la Conferencia CAF Relaciones Europa-América Latina en la Casa de América de Madrid, ha suspendido su intervención en este foro para volver a La Rioja y a las 18:30 horas hacía unas declaraciones a unos 600 metros de la planta Iniciativas Bioenergéticas en la que hacia las 12:46 horas de hoy se ha registrado una fuerte explosión con posterior incendio que ha costado la vida a dos trabajadores.
Tal y como hemos informado en esta web, poco antes de estas declaraciones, un equipo de Policía Judicial accedía a la planta para el reconocimiento cadáveres, después de que efectivos de la Guardia Civil del Servicio de Desactivación de Explosivos y Defensa NRBQ (Nuclear, Radiológica, Biológica y Química) se asegurasen de que la calidad del aire en la zona permitía la entrada.
Con respecto a la información de Ecologistas en Acción en la que indicaba que durante los últimos años este colectivo había presentado numerosas denuncias ante la administración por la gestión de la factoría siniestrada, Andreu ha sido cauta comentando que, en estos momentos, «se está recabando toda la posible información, cosa que se hace desde esta mañana y cuando la tengamos podremos dar información veraz y concreta».
La jefa del Ejecutivo riojano ha agradecido la intervención de bomberos del consorcio CEIS, así como de los llegados de Logroño, Navarra y Álava. Igualmente ha valorado la rápida y correcta intervención de los servicios sanitarios, Guardia Civil, Policía Local, Protección Civil y Cruz Roja.
SITUACIÓN DE EMERGENCIA DE NIVEL 1
Por su parte Fermín Galilea, jefe de Emergencias de Protección Civil de La Rioja, cuyas primeras declaraciones recogía LA BRÚJULA, ha explicado los pormenores del incendio que sigue activo a las 20:00 horas, destacando que, afortunadamente, la densa humareda tóxica que produce el quemado del combustible se aleja de los núcleos de población por efecto del cierzo (viento noroeste) que sopla hoy en el valle del Ebro.
Galilea ha explicado que este incendio constituye una emergencia de nivel 1; es decir, de las que presentan riesgo de daños graves, importantes e inminentes.
Los bomberos han intervenido de inmediato en un recinto con cuatro depósitos de 400 m3 cada uno, de los que dos eran de biodiesel (producto terminado) y otros dos contienen agentes químicos para el proceso de producción del gasoil ecológico.
La mayor emergencia era evitar que el fuego alcanzase un depósito de metanol de 1.800 m3 y esa ha sido la principal intervención. También se interviene en el enfriamiento del propio incendio tratando de reducir su temperatura para verter luego una espuma que cree una capa superficial que consiga sofocar las llamas.
La temperatura se controla con cámaras térmicas y se trabaja en la seguridad del propio personal que trabaja en el incendio, ha dicho Fermín Galilea que ha calificado la situación de «normalidad».
Ha añadido que las rachas de viento han llegado a 50 kilómetros por hora. Con esta velocidad del viento y su procedencia se ha formado «una pluma de humo con ángulo y altura favorable porque dispersa el humo».
No obstante ante un cambio de dirección e intensidad del viento ha advertido que lo oportuno sería que la población de Calahorra cerrase las ventanas y se abstuviera de salir a la calle.
Finalmente ha dicho que el incendio, si bien en este momento está controlado, tardará bastante tiempo en ser apagado.