
Varios paseantes habituales de la ruta a Caricente han llamado la atención de LA BRÚJULA el pasado fin de semana sobre la acumulación de basura en un punto del entorno de esta fuente y por otra parte valoran muy positivamente otros aspectos sobre el mantenimiento de este enclave natural.
La fotografía que nos acercamos a tomar refleja lo que dice uno de los paseantes: «Es cierto que la basura está muy localizada en el espacio reservado para ella. Esto es gracias a que la inmensa mayoría de la gente que visitamos este paraje somos gente limpia y la echamos allí; pero los bidones que la contienen están a rebosar. Por cierto que aveces ocurre lo mismo en los bidones colocados en el cercano pantano de Perdiguero«.
Otro comenta que no sabe si la recogida de la basura y vaciado de los bidones depende del Ayuntamiento o de Medio Ambiente; «lo que está claro es que el que tenga competencias lo tiene que hacer porque en este lugar hay jabalís, perros y otros animales que acuden en busca de alimento a los cubos de basura terminan sacándola de su lugar y extendiéndola por todo».

Las mismas personas que critican la falta de recogida de las basuras elogian en cambio el entorno creado en Calicente: «Seguramente este sitio tiene los álamos más viejos y grandes de todo el término municipal. El Gobierno de La Rioja valló con estacas la zona, dejaron un espacio para aparcamiento, hicieron unos bancos y mesas estupendos, pusieron dos bombas de mano para que podamos disponer de agua y de vez en cuando las reparan y mantienen. Además desde que soltaron agua de la presa de Enciso y el Cidacos lleva caudal, la fuente vuelve a manar agua y el sitio es encantador… Así que con la recogida de la basura más frecuentemente, la fuente de Caricente sería perfecta».