El calagurritano David Antoñanzas Paredes, junto a Fernando Sancha, que está de apoyo en la parroquia de los Mártires, protagonizaron ayer en el Seminario Diocesano, en Logroño, un importante acto litúrgico en su vida de compromiso con la Iglesia católica.
La Admisión a las Órdenes Sagradas es el rito por el que la Iglesia da la entrada solemne para poder recibir más adelante el Sacramento del Orden, mientras que el acolitado es uno de los ministerios para dar servicio en el altar y ayudar al presbítero durante las celebraciones litúrgicas, especialmente la misa.
Un acto que resultó muy entrañable para los protagonistas, sus familias y muchos jóvenes de Calahorra que acuden a la catequesis de David y que quisieron acompañarles en la liturgia.
