Del 28 de junio al 1 de julio Calahorra va a estar nuevamente tomada por la juventud. Si el festival Holika que acogió esta ciudad por primera vez el año pasado, fue todo un hito, la edición de 2023 va a superar con creces a la anterior.
El festival va «a toda mecha», como lo prueba que desde hace cuatro días los abonos están agotados. No queda ninguna modalidad de abono, ni general, ni VIP.
Esto ha supuesto toda una alegría para la organización, cuyo máximo responsable, Mario Cornago, de Burcor Producciones, confiesa que se siente sorprendido por la avalancha de «holikers» que ya con tanta antelación se ha volcado en comprar sus abonos.
«No puedo más que dar las gracias, de verdad; estamos superfelices viendo la reacción y, la verdad, es que esperábamos una buena respuesta, pero no tan pronto», comenta Cornago.
Con los abonos vendidos, solo faltarían mil entradas por vender. Esas mil entradas son «el pequeño porcentaje que la Ley de Espectáculos obliga a reservar para entradas de día, pero el 99% del aforo ya está vendido», dice Mario Cornago que no acaba de creerse que «entre los cuatros días alcanzaremos los 80.000 asistentes».
Mientras tanto, la organización no se detiene; el festival sigue captando seguidores, y hace más de un mes ya dio el primer avance de un gran plantel de artistas que vendrán a Calahorra. Además, los encargados de animar las redes sociales no paran de lanzar pequeñas píldoras para dar mayor aliciente a los asistentes, como los «promotokens» recientemente publicados.
Y así, con la velocidad de crucero que está tomando el festival, ya se están preparando los diferentes medios de transporte para acercar al público desde Barcelona, Burgos, Guipúzcoa, La Rioja, Lleida, Madrid, Navarra, Valencia, Valladolid, Vitoria, Vizcaya y Zaragoza.
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