Casi 100.000 euros para comprar dos radares de control de velocidad

accidente calle Mediavilla
Daños en una fachada producidos por un coche que se salió por la tangente de la curva de Mediavilla arrancando además un árbol y una farola

El Ayuntamiento de Calahorra ha adjudicado el contrato para el suministro e instalación de dos cinemómetros (radares) de control de velocidad, tres cajas para la instalación de cinemómetro fijo y dos trípodes para cinemómetro móvil. El objetivo es «prevenir accidentes por exceso de velocidad que han supuesto recientemente y de manera persistente un peligro  para los vecinos de algunas calles».

Según nota informativa del Consistorio, uno de los radares se instalará próximo a la curva de Mediavilla, en la que por cierto no existe señal de peligrosidad, a pesar de ser «una vía de especial concentración de accidentes, donde los vehículos han impactado contra edificios privados, mobiliario público y al menos en dos ocasiones contra el centro educativo allí situado». 

Fue en la Junta de Gobierno Local del pasado lunes cuando se adjudicó este contrato a la empresa OBOID S.L. por 90.629 euros.

El contrato incluye el suministro de dos cinemómetros radar de control de velocidad instantánea-multicarril con flash, tres cajas de seguridad para colocación de cinemómetro fijo y dos trípodes para cinemómetro móvil. Contempla también el montaje, conexionado, verificación y homologación de dos cinemómetros que permita realizar controles de velocidad a los vehículos que circulan por las vías públicas de la ciudad de Calahorra, que pueda ser montado sobre trípode y posición fija que permita su utilización en horario diurno y nocturno.

Asimismo   deberá   hacerse   cargo   tanto   de   las   revisiones   periódicas   como   del   mantenimiento, calibración  y  reparaciones  o  cualquier  otro  gasto  relacionado  con  el  radar  y  proporcionar  unos  de sustitución  durante  el  tiempo  en  que  dichas  revisiones  o  reparaciones  se  estén  realizando  durante todo el tiempo de garantía.

Uno de esos radares se colocará en la calle Mediavilla, por ser una vía de especial concentración de accidentes, donde los vehículos han impactado contra edificios privados, mobiliario público y al menos en dos ocasiones contra el centro educativo allí situado. En el caso de esta calle, «la colocación de reductores de velocidad efectuada hace años no ha repercutido en una rebaja de la velocidad en la calle y ha generado importantes molestias de ruido y vibraciones a los vecinos por lo que se ha optado por esta nueva solución a la espera de que sea efectiva», dice el Ayuntamiento.

Las otras dos cajas fijas se colocarán en vías de accesos prioritarias que serán señalizadas cumpliendo con la normativa de tráfico y que permitirán realizar controles aleatorios o atender quejas concretas de vecinos por exceso de velocidad en sus calles a través de los puntos móviles.

Antes de la entrada en funcionamiento de estos dispositivos se realizará la pertinente campaña de información ciudadana.

Curva de Mediavilla copia
Curva de Mediavilla

Además, la nueva normativa de la Dirección General de Tráfico sobre velocidades en vías urbanas, próxima a entrar en vigor, hará aún más necesarios dichos dispositivos, que serán especialmente útiles para que la Policía Local pueda controlar la velocidad a la que se circula por el casco urbano.

Según datos de la DGT que maneja el Ayuntamiento, en 2019 los fallecidos en accidentes de tráfico en las ciudades aumentaron un 6% mientras se reducían un 6% los fallecidos en vías interurbanas. Además, el 82% de los fallecidos en ciudades en 2019 fueron usuarios vulnerables, es decir, peatones, ciclistas y motoristas.

La reducción de velocidad aminora en un 80 % los riesgos de fallecimiento como consecuencia de un atropello. Si la velocidad del vehículo que impacta es de 30 km/h el riesgo es de un 10%; si la velocidad es a 50 km/h, ese riesgo de fallecimiento se eleva alrededor del 90%

Finalmente, el Ayuntamiento de Calahorra se encuentra actualmente redactando el Plan de Movilidad Urbana y Sostenible que contempla medidas complementarias para el control de la velocidad en el casco urbano para evitar accidentes.