En la pasada madrugada, el conductor de un vehículo todoterreno, natural de Azagra (Navarra), entró a la ciudad por la calle Mediavilla a 102 kilómetros por hora, saliéndose de la calzada en la curva y colisionando de forma aparatosa contra las vallas junto al Colegio Teresianas, lo que causó grandes desperfectos en el mobiliario urbano y en el propio vehículo.
El vehículo, que fue detectado por el radar dos segundos antes de salirse de la vía, quedó seriamente dañado como se puede apreciar en la fotografía. Su conductor ha sido denunciado por un delito por exceso de velocidad con el agravante de haber causado por ello un accidente de circulación con daños materiales. Además, una vez detenido, fue sometido a un test de alcoholemia, en el que dio positivo, por lo que al primer delito se le añadirá un segundo por conducir bajo los efectos de bebidas alcohólicas causando un accidente de tráfico.
El conductor será responsable del pago de los desperfectos causados al mobiliario y arbolado urbano de la ciudad, valorados por los servicios técnicos municipales en 3.750 euros.
De este grave siniestro informa el Ayuntamiento en una nota de prensa en la que advierte que el el accidente «podría haber supuesto graves consecuencias para cualquier peatón que se hubiera encontrado en las inmediaciones de dicha calle, de no haberse producido en mitad de la noche, ya que circular a más de 50 kilómetros por hora dentro de una ciudad, supone que una colisión contra cualquier persona puede ocasionarle la muerte».
Según informa el Ayuntamiento, el rádar ha permitido registrar la velocidad a la que circulaba y por tanto certificar la comisión de este delito. Un delito, que aparte de su correspondiente sanción económica también supone la retirada del carnet de conducir al infractor por un plazo mínimo de 12 meses «garantizando de este modo que este individuo irresponsable dejará de ser un peligro público para las personas».
Valoraciones sobre la eficacia del radar
El Ayuntamiento de Calahorra dice que es «en el interés de la salvaguarda de las personas, por lo que ha instalado un radar en dicha calle» y añade que gracias a este dispositivo el conductor va a poder ser acusado de la comisión de los citados delitos.
A la nota de prensa del Ayuntamiento cabe puntualizar no obstante, que el radar ha permitido «cazar» rápidamente al infractor, pero quizás con un golpe de esta envergadura, su conductor no hubiera podido evadirse fácilmente.
Igualmente, aunque dice el Ayuntamiento que el radar cumple la función de «salvaguardar a las personas», no hubiera evitado ninguna trágica consecuencia de haber cruzado alguna persona o algún vehículo en ese momento. Por tanto, el radar lo que tiene en este caso es una mayor eficacia en términos punibles para el conductor.
Por otra parte, muchos conductores vienen comentando que el cartel de aviso de radar es muy pequeño y que pasa desapercibido, sobre todo para quienes han transitado toda la vida por las dos cuestas donde han instalado radares (Mediavilla y Estación).
Por eso también cabe preguntarse si un cartel más grande hubiera evitado el accidente.
